Al municipio de Santa Rosa de Cabal llegó El Diario del Otún para atender el llamado de la comunidad de la vereda Las Mangas perteneciente al corregimiento del Sur del municipio de las Araucarias.
Allí fuimos recibidos por la Presidenta de la Junta de Acción comunal, Vianey Enciso Leal, Javier Amado Sepúlveda y Edelmira de Jesús Bedoya, quienes hicieron un balance de las necesidades más sentidas de este sector casi abandonado por la administración.
Vivienda
Una de las situaciones que más preocupa a esta comunidad es el deterioro de las viviendas y la falta de apoyo a las familias que se encuentran afectadas.
Uno de los casos más preocupante está relacionado con la vivienda de Edelmira de Jesús Bedoya donde viven tres familias y que se encuentra en peligro.
Es tan delicada la situación de estas familias que las vivienda se encuentra amarrada con templetes de acero para evitar que se desplome, los cimientos se encuentran totalmente afectados, ya se cayó una pared y la parte baja está inhabitable debido al peligro que representa para todos sus habitantes.
Según Edelmira de Jesús Bedoya, su vivienda está así de afectada por culpa de la administración municipal representada por sus funcionarios que hicieron mal las cosas y como consecuencia de esos actos irresponsables la vivienda y la vida de sus ocupantes está en peligro.
Inicialmente el paso de una maquinaria pesada por el sector afectó el segundo piso, por lo que toda la familia se tuvo que acomodar en la parte baja, pero allí no terminó el problema.
En los trabajos de pavimentación de la carretera frente a la vivienda, no se canalizaron las aguas lluvias lo que ocasionó que durante la época invernal del año pasado, toda el agua inundó varias casas y desplomó uno de los muros de la estructura de Edelmira de Jesús Bedoya.
No cumplieron
La administración les ofreció una ayuda representada en unos meses de arriendo pero a la fecha no han intervenido la vivienda para resarcir los daños generados por parte de las acciones de los funcionarios responsables de las obras.
Este es uno de los casos, en donde otra familia sufrió el desplome total de la vivienda desde hace varios meses y a pesar que solicitaron ayuda a la administración municipal no les han ayudado para recuperar sus hogares y hoy viven de posada como judíos errantes.
Vía
La comunidad se mostró agradecida con la Gobernación de Risaralda que por fin, después de muchos años, atendió las suplicas de la comunidad para mejorar la carretera de este sector.
Pero en este tema también expresaron su preocupación por la actitud de los obreros encargados del trabajo ya que el maquinista que lo realizó tumbó los cabezotes de las transversales y esto generó una serie de problemas.
Por esta razón, las transversales se convierten en trampas donde ya han caído algunos vehículos al tratar de dar vía a otro carro.
Preocupa igualmente que en el sector conocido como Calichales de la misma vereda, se ha reactivado una falla geológica y hasta el momento no se ha realizado ninguna intervención, por lo cual se hace un llamado a la Oficina de Obras Públicas del municipio de Santa Rosa de Cabal y a la Gobernación de Risaralda para que se atienda esta situación antes que este amplio sector se quede sin vía.
Recreación
Los habitantes de esta comunidad reclaman la culminación de las obras de adecuación de la cancha que se quedó iniciada lo que tiene perjudicados a los jovenes de este sector.
Según sostuvieron los líderes de la comunidad se requiere adecuar, además de la cancha de fútbol las canchas de baloncesto micro fútbol y los juegos infantiles para esta comunidad.
Salud
Una de las necesidades de esta comunidad está relacionada con la salud ya que los habitantes de este sector deben salir de la vereda localizada en Santa Rosa de Cabal, pasar por Pereira, Dosquebradas y reingresar a Santa Rosa para tratar de lograr una cita médica.
La comunidad, en cabeza de la presidenta de la Junta de Acción Comunal, propuso al Alcalde de Santa Rosa de Cabal que mediante un convenio se habilitara el puesto de salud de San José que se encuentra cerrado para atender allí a la comunidad de Planadas y Las Mangas, propuesta que fue inicialmente avalada por el mandatario local, pero que hasta la fecha no se ha cristalizado.
La comunidad espera de la administración, soluciones efectivas y no más promesas como ha sucedido hasta ahora que sólo desmejora la calidad de vida de sus habitantes.
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